El verano, a pesar de ser una época de descanso y disfrute para muchos, también puede traer consigo un enemigo silencioso para los/as trabajadores/as: la astenia veraniega. Este trastorno temporal se caracteriza por una sensación generalizada de cansancio, fatiga y falta de energía, lo que puede afectar negativamente al rendimiento laboral, aumentar el absentismo y deteriorar el clima laboral.

En este artículo, como expertos en salud, bienestar y prevención de riesgos laborales, te ofrecemos una guía completa para combatir la astenia veraniega en el trabajo y mantener la productividad durante el verano.

¿Qué es la astenia veraniega?

La astenia veraniega es un trastorno temporal que se produce principalmente debido a los cambios bruscos de temperatura entre las estaciones. El calor, la deshidratación, la falta de sueño y las alteraciones en los horarios de comidas y actividades pueden desencadenar este malestar.

Síntomas de la astenia veraniega:

·         Cansancio físico y mental

·         Falta de energía y motivación

·         Dificultad para concentrarse

·         Irritabilidad y cambios de humor

·         Dolor de cabeza

·         Sueño no reparador

·         Disminución del apetito

¿Cómo afecta la astenia veraniega al ámbito laboral?

Las consecuencias de la astenia veraniega en el ámbito laboral pueden ser significativas:

Disminución de la productividad: El cansancio y la falta de concentración dificultan el rendimiento laboral, lo que puede traducirse en una menor producción y un aumento de errores.

Aumento del absentismo: Los trabajadores pueden sufrir más bajas por enfermedad o solicitar permisos para descansar y recuperarse.

Deterioro del clima laboral: El malestar físico y anímico puede generar irritabilidad, desmotivación y conflictos entre los compañeros de trabajo.

¿Cómo combatir la astenia veraniega en el trabajo?

1. Cuida tu alimentación:

• Consume alimentos ligeros, frescos y ricos en agua.
• Evita comidas copiosas y pesadas.
• Aumenta el consumo de frutas, verduras y hortalizas.
• No olvides beber abundante agua durante todo el día.

2. Mantente hidratado:

• Bebe agua con frecuencia, incluso si no sientes sed.
• Puedes consumir bebidas refrescantes sin azúcar o con un contenido reducido de azúcar.
• Evita bebidas alcohólicas y azucaradas.

3. Duerme bien:

• Establece un horario regular de sueño y cúmplelo lo máximo posible, incluso los fines de semana.
• Crea un ambiente favorable para el sueño en tu dormitorio: temperatura adecuada, oscuridad y silencio.
• Evita el uso de dispositivos electrónicos antes de acostarte.

4. Realiza actividad física:

• Practica ejercicio físico de forma regular, al menos 30 minutos al día.
• Elige actividades que te gusten y que puedas realizar al aire libre, aprovechando el buen tiempo.
• El ejercicio físico te ayudará a mejorar tu estado físico y anímico.

5. Regula la temperatura:

• Evita trabajar en ambientes demasiado calurosos.
• Si es posible, utiliza aire acondicionado o ventiladores.
• Viste ropa ligera y transpirable.
• Date duchas de agua fría durante el día para refrescarte.

6. Toma descansos cortos:

• Levántate de tu puesto de trabajo cada hora y realiza breves estiramientos.
• Camina por la oficina o realiza alguna actividad que te ayude a desconectar.
• Aprovecha los descansos para tomar un poco de aire fresco.

7. Cuida tu salud mental:

• Realiza técnicas de relajación como la meditación o el yoga.
• Dedica tiempo a actividades que te gusten y te ayuden a desestresarte.
• Si te sientes abrumado, no dudes en buscar ayuda profesional.

La astenia veraniega es un trastorno temporal que puedes combatir con hábitos saludables y una actitud positiva. ¡Disfruta del verano y rinde al máximo en tu trabajo!

Recuerda: Si los síntomas de la astenia veraniega son severos o persistentes, consulta a un médico para descartar otras posibles causas